La experiencia que aquí se presenta hace parte del Proyecto Virtual Renovación de la Didáctica en el Campo del Lenguaje para los Primeros Grados de la Escolaridad, desarrollado por el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe, CERLALC. Se trata de un proceso de formación, sistematización e investigación en el aula, desarrollado durante un año, cuyo propósito central es la transformación de las prácticas de enseñanza del lenguaje. Cohorte 2010, financiada por el Ministerio de Educación Nacional de Colombia, en la que participaron 120 docentes en ejercicio, de los primeros grados de escolaridad.

11. ¿Qué nos aportó el proyecto?

11. ¿Qué nos aportó el proyecto?

Esta secuencia didáctica fue bastante significativa a nivel personal y laboral. Desarrollamos todo lo que aprendimos durante el curso. Nos enseñó que el niño inicia su oralidad en casa, y llega en condiciones de participar en situaciones informales, por ello resulta de gran importancia, desde muy temprano, abrir espacios en la escuela de una manera dinámica en los que el niño tenga la oportunidad de indagar, investigar y expresar sus ideas y su sentir, para acercarse y participar en espacios más formales de habla.
Con nuestra experiencia y con la enseñanza del curso virtual para la renovación de la didáctica del lenguaje para los primeros grados y las orientaciones de nuestra tutora  Catalina Roa pudo ser posible la implementación y el desarrollo de la Secuencia Didáctica, en la que  también nosotras aprendimos a conocernos, valorarnos y respetar nuestras diferencias como personas. Fue de vital importancia el compromiso y dedicación asumido por nuestra tutora, pues siempre encontramos orientaciones precisas que nos permitieron avanzar, encaminar o modificar acciones en pro del fortalecimiento de nuestro quehacer pedagógico, encantando a los estudiantes con todas las herramientas brindadas, pues aprendimos a crear y rescatar espacios de oralidad que son tan indispensables en el aula para que los niños ganen seguridad y aprendan a respetar la voz del otro y la de sí mismo.
De igual manera agradecemos a los padres de familia y estudiantes quienes siguieron de la mano las orientaciones dadas por nosotras, esforzándose en la búsqueda de información sobre los personajes fantásticos y la elaboración del vestuario, socializando sus saberes y narrando anécdotas que los acercaron más a sus hijos y a la institución Toda esta confianza depositada permitió que cada niño descubriera su voz y el lugar de ésta en un grupo, y tomara de referencia  la de sus compañeros , reconociendo la importancia de las normas de interacción.
A nuestros directivos y compañeros docentes nuestra sincera gratitud y reconocimiento por el apoyo y solidaridad brindada  respetando los espacios planeados para la implementación de la secuencia. Al Ministerio de Educación Nacional por brindarnos la oportunidad de realizar este valioso curso que nos permitió renovar nuestras didácticas para la enseñanza del lenguaje en los primeros grados de escolaridad, privilegiando los procesos de lectura, escritura y oralidad.
Aprendimos a darle valor a las situaciones que se abren para la oralidad y otros procesos del lenguaje. Lo anterior nos llevó a transformar nuestra práctica docente y a darnos cuenta que no sólo debemos enfocarnos en los procesos de lectura y escritura sino que también se debe poner en práctica la oralidad, proceso en el cual la familia también es de gran importancia. Reconocemos ahora que abordar la oralidad implica tener en cuenta las normas de interacción para que haya una armonía en la vida social y cotidiana del estudiante, puesto que el niño llega a la escuela con un lenguaje coloquial, pero  al aprender a investigar, a buscar información, a prepararse, va a participar sin miedo ni temores, pues se siente seguros y además va aprendiendo a participar en situaciones formales.
Con esta práctica estamos convencidas que es importante brindar en el aula de clase, los espacios de diálogo, conversación, escucha, reflexión, donde los niños puedan expresar sus ideas y sentimientos libremente, donde sea reconocido por el otro, reconocer a los demás, darse cuenta que ocupa un lugar importante, que en ocasiones se sienta líder y pueda entablar un conversatorio, que su voz sea reconocida y reconozca la de los demás compañeros.
Con estos espacios de trabajo con la oralidad, el niño aprende a ser crítico, analítico, pensante  y, expone y expresa su punto de vista de forma respetuosa.

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